A Europa sin Román

Villarreal es un club español con unos escasos 10 años en la Primera División del fútbol ibérico. Y sin embargo en tan pocas temporadas ha logrado alcanzar un lugar que seguramente hubiera sido una utopía durante su militancia en los torneos de ascenso.
A su arribo a la Liga de las Estrellas, en el año 1998, su objetivo lógico y concreto era permanecer en la categoría máxima. Años más tarde, algo afianzado en la competencia aspiró a incrementar sus exigencias y apostó a mejores fichajes en el mercado mundial. Así fue como logró incorporar entre tantos a Juan Román Riquelme como figura destacada del plantel profesional para la temporada 2003/4.
Los frutos de la cosecha no se hicieron esperar. En enfrentamientos apretados (0-0 y 0-1) se le cerraron las puertas de la final de la UEFA nada menos frente al Valencia de Rafa Benitez, alcanzando su mejor performance hasta entonces en su primera participación del torneo europeo. El equipo era conducido por Francisco García, y alineaba en sus líneas grandes jugadores como Pepe Reina, Belletti, Coloccini, Roger, Sonny Anderson, José Mari y Riquelme. Finalmente Valencia se consagraría campeón del título frente al Marsella de Didier Drogbá.
En la siguiente temporada, asumiría la dirección del equipo el chileno Manuel Pellegrini con quien conseguiría la mejor ubicación en liga (tercera posición) en su historia por debajo de Barcelona y Real Madrid. De esta manera obtuvo el pasaje a la Champions League 2005/2006.
Tras superar la fase inicial compartiendo grupo junto a Manchester Utd, Benfica y Lille, supo superar en octavos y cuartos de final al Rangers y al Inter de Milán respectivamente, llegando a clasificar entre los mejores 4 equipos de Europa, de la mano de Riquelme como dueño indiscutido del equipo e ídolo incondicional de la hinchada . La semifinal fue disputada ante el Arsenal de Henry, Pirés, Ljungberg, Fabregas, Touré y Lehmann entre otros. Y nuevamente se quedó afuera por la mínima diferencia.
Desde entonces la relación entre Riquelme (el jugador estelar del equipo) y Pellegrini (el supuesto padre de la criatura) se ha visto deteriorada y sin retorno. Actualmente Riquelme no tiene lugar en el equipo, por decisión del entrenador, ni tampoco ha podido fichar para otras instituciones ante la falta de ofertas concretas.
Se dice que Román es un jugador conflictivo y precisamente por esto paga hoy con su inactividad. Incluso en el propio plantel hay campanas que suenan a favor (Pirés) y en contra (Franco) del ex Boca. El presidente Roig y el público, quienes supieron adorar el crack argentino, dan su respaldo al chileno, y el equipo sin haber vuelto a los primeros planos en Europa continúa mostrando su buen paso en la liga. Esta tarde el equipo se presenta en la fecha inicial de la UEFA y Riquelme no ha sido siquiera convocado. Una apuesta demasiado fuerte (y caprichosa?) para un torneo de esta magnitud.